CEMIT lidera proyecto internacional de investigación financiado por las Naciones Unidas

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El proyecto de investigación, coordinado por el Centro Multidisciplinario de Investigaciones Tecnológicas de la Universidad Nacional de Asunción (CEMIT-UNA), denominado “Rescue of Seeds of Creole Varieties for the Food Security in Latin America” (Rescate de semillas de variedades criollas para la seguridad alimentaria en América Latina), que tiene el objetivo de realizar un diagnóstico de la agrobiodiversidad de la agricultura familiar en Latinoamérica, recibió financiación del Grupo de los 77 (G-77) de la Organización de las Naciones Unidas.

La investigación contempla realizar un diagnóstico de la diversidad de granos de autoconsumo en comunidades rurales de la región, de la composición nutricional de los granos y la determinación de la calidad genética como semillas para la propagación.

Este proyecto es coordinado por los investigadores del CEMIT Ing. Agr. Antonio Samudio Oggero (coordinador) y del Dr. Héctor Nakayama (coordinador alterno). Además, por Paraguay, se cuenta con la participación de la Organización Gestión de Desarrollo Social (GEDES) y de la colaboración del Centro de Innovación para la Agricultura Familiar (CIAF/UNA) y de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNA. Junto a estas instituciones se suman el Instituto de Ciencias Agrícolas (INCA) de Cuba, el Instituto de Innovación Agropecuaria de Panamá (IIAP) y la Universidad Agraria La Molina, de Perú.

Importancia de la agrobiodiversidad

La agrobiodiversidad -o diversidad agrícola- nace de la intersección de la diversidad biológica y cultural de una población, y representa una conexión estrecha con los antepasados.

Desde una perspectiva social, la diversidad de especies asociada a los sistemas agrícolas aporta una variada fuente de recursos, como alimentos, forrajes, leña, materiales de construcción, medicinas, fibras. Pero también la diversidad intraespecífica de los cultivos aporta valiosos recursos genéticos que permiten atender diferentes necesidades culturales -por ejemplo, colores, sabores, texturas, tiempo de cocción en actividades culinarias-, y proveen variadas opciones técnicas frente a la heterogeneidad ambiental, como la adaptabilidad a diferentes tipos de suelos, altitudes, humedad, sequía, heladas entre otras variables.

A su vez, la pérdida de biodiversidad se refiere a la disminución o desaparición de la diversidad biológica, entendida esta última como la variedad de seres vivos que habitan el planeta, sus distintos niveles de organización biológica y su respectiva variabilidad. Tal como lo afirmó Ahmed Djoghlaf, exsecretario ejecutivo del Convenio sobre la Diversidad Biológica del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente: “La pérdida de biodiversidad es rápida y continua. Durante los últimos 50 años, los seres humanos hemos cambiado los ecosistemas más rápida y extensamente que en cualquier otro período comparable de la historia de la humanidad. Las causas directas de la pérdida de biodiversidad no muestran señales de disminución”.

Grupo de los 77

El Grupo de los 77 es la mayor organización intergubernamental de países en desarrollo en las Naciones Unidas, que proporciona los medios para que los países del Sur puedan articular y promover sus intereses económicos colectivos y mejorar su capacidad de negociación conjunta sobre los principales temas económicos internacionales en los Estados Unidos, sistema de las Naciones Unidas, y promover la cooperación Sur-Sur para el desarrollo.